A partir de hoy los visitantes del Centro de Interpretación de la reina Isabel I de Castilla se encontrarán con algunas actualizaciones realizadas en la exposición permanente que a lo largo de este año cumple sus 20 años de apertura.

Esta intervención en la museografía del centro corresponde a la primera fase del proyecto de actualización encargado por el Ayuntamiento de Medina del Campo para el Palacio Real Testamentario.

Se ha intervenido en cuatro zonas diferentes del centro:

Área de recepción: Sustitución del mueble de atención al visitante.

El anticuado mueble de atención al visitante, muy deteriorado por el uso y el paso del tiempo, ha sido sustituido por otro de características estéticas muy similares pero actualizado y adaptado al espacio en el que se encuentra.  Este mueble permitirá una mejor atención al visitante, ya que cuenta con una zona adaptada para personas con discapacidad, mejor exposición de productos que se pueden adquirir y una zona interna mucho más accesible y cómoda para el personal del centro.

Sala de Presentaciones: Creación de un área infantil y actualización de la zona de visionado.

Esta sala es el primer contacto que tienen los visitantes con el centro. Es el lugar donde se presenta la historia del Palacio y la estrecha relación de la reina Isabel con la villa de Medina a través de un pequeño audiovisual.

Buscando adaptar este espacio para que los más pequeños puedan vivir una experiencia acorde a sus expectativas, se ha creado un área infantil en la que los visitantes más pequeños podrán disfrutar de la proyección en una zona pensada y adaptada a ellos, donde compartirán espacio y tendrán una primera toma de contacto con los protagonistas de este palacio.

Además, en esta misma zona se ha renovado y ampliado el espacio reservado a los visitantes para que visualicen la proyección con la sustitución de sillas por cinco grandes bancos que les permitirá disfrutar de esta primera toma de contacto con el centro.

Sala del Testamento II. Ampliación del espacio expositivo dedicado a la recreación de la habitación de la Reina y creación de una zona de descanso.

Quizás este espacio sea el más esperado por los visitantes del palacio. Por lo que, con el objetivo de dotar de mayor intimidad y privacidad a la “alcoba” de la reina, además de provocar un efecto sorpresa y crear un ambiente más emocional al visitante, se ha intervenido en este espacio tan especial completándolo con la inclusión de attrezzo específico como alfombras, tapiz, escritorio, candelabros… de tal manera que la habitación amplía sus dimensiones e invita al visitante a descubrir la parte más íntima de este centro.

Por otro lado, en este mismo espacio y para poder disfrutar mejor de él, se ha colocado una pequeña zona de descanso en el centro de la sala compuesto por 6 puf que permitirán al visitante tomarse un descanso mientras disfruta y observa todos los detalles de esta sala tan especial.

Sala del Testamento I: recreación del “Salón del trono”.

Por último, quizás el plato fuerte de esta intervención en la museografía del centro sea la creación de un nuevo espacio expositivo que permite recuperar parte de la esencia del palacio original: el “Salón del trono”.

Esta sala actualmente está centrada en la presentación del facsímil del testamento y del codicilio que la reina Isabel dictó y firmó entre los muros de este palacio. Estos documentos están acompañados de dos grandes paneles y de un interactivo en el que el visitante descubre página a página estos importantes documentos.

Los palacios y casas palaciegas en las que residieron los Reyes Católicos solían tener una organización y disposición muy precisa. Estos edificios poseían una Sala Real, Sala Rica o Salón del Trono con una función bastante bien delimitada. En esta estancia tenían lugar las grandes ceremonias, las recepciones solemnes a las embajadas, los banquetes oficiales o las audiencias públicas que todos los viernes del año ofrecían los soberanos a sus súbditos.

Este representativo símbolo de poder es lo que los visitantes se encontrarán en este nuevo espacio, pudiendo interactuar en él, sentarse y fotografiarse, disfrutando de la experiencia de sentirse “los reyes” del palacio.  La presencia del trono en el espacio dedicado al testamento también ayuda al visitante a comprender el peso y la importancia política y social que tuvieron estos documentos en la Castilla del siglo XVI.

Para recrear este nuevo espacio, se ha creado una estructura de madera sobre la que se sitúan los dos tronos protegidos bajo un dosel con el escudo de los Reyes Católicos. Se ha recreado un zócalo que sigue el modelo original del encontrado en las excavaciones arqueológicas y que forman parte de los fondos del Museo de las Ferias.

La intención del Ayuntamiento es que poco a poco este proyecto de actualización del Palacio Real Testamentario vaya tomando forma y los visitantes van descubriendo a este importante personaje histórico de una manera más amplia, didáctica y actualizada.

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